Dar el ejemplo

Uno de los aspectos más difíciles de ser un líder es que siempre estás en el escenario. Las personas siempre te están mirando, siempre hablando de ti, siempre probando tu credibilidad. Por eso es tan importante dar el ejemplo. Los líderes sirven de guía y de inspiración a sus seguidores.

Cómo ser un líder que predique con el ejemplo.

1. Administre mejor su tiempo. El tiempo es un activo valioso nunca se puede recuperar. Pero si se invierte sabiamente, puede generar grandes resultados en la vida personal y laboral. 
2. Asegúrese de que su calendario, sus reuniones, sus entrevistas, sus correos electrónicos y todas sus actividades de trabajo muestren que usted es una persona organizada. 
3. Use un lenguaje apropiado. Las palabras son poderosas y pueden influir en las personas que lideras. Las palabras tienen poder para herir o hacer sentir bien a las personas. 
4. Sea un buen dirigente: Imparta órdenes específicas y supervise de cerca el cumplimiento de las tareas. 
5. En todo lo que pueda, refuerce el comportamiento positivo de sus seguidores. 
6. Transmita a través de su vivencia ejemplos de un comportamiento ejemplar en su vida personal o laboral. 
7. Mantenga sus compromisos; cumpla sus promesas. 
8. Haga preguntas útiles a sus colaboradores que les mantengan enfocados en los valores y prioridades de la organización. 
9. Cuide su apariencia personal, usted es un líder; desempeñe su papel, asegúrese de que siempre esté vestido pulcramente y acorde al tipo de actividad. 
10. Supérese. Haga un inventario de sus realizaciones más recientes: seleccione una o varias diferencias personales y a continuación trabaje sobre ellas para mejorar.